Con un sonido visceral, ‘Comiendo Tierra’, lanzamiento más reciente del dúo de rock experimental Operador, se levanta en contra de aquellos que nos hacen tragar polvo
‘Comiendo Tierra’ es violenta y está atravesada por el hastío que provoca la manipulación política, la corrupción y el deterioro de la sociedad. En ella, los hermanos Javier y Giovanni Pasuy, fundadores de Operador, recorren diversas expresiones del rock, para entregar una canción experimental de riffs arenosos, golpes secos de batería y efectos saturados.
La lírica de ‘Comiendo Tierra’, al igual que su sonido, es explosiva. La voz rasgada de Giovanni, baterista de Operador, cobra protagonismo y proyecta la inconformidad bajo la que fue concebido el sencillo. Mientras que Javier, en la guitarra y los coros, recrea una atmósfera que transita por el drumb ‘n’ bass y el industrial hasta llegar a las texturas espesas del metal.
Operador supera los 12 años de trayectoria. Desde su formación, los hermanos Pasuy, han buscado proyectarse con una identidad sonora que se aleja de etiquetas definidas, para transitar con libertad por diferentes géneros del rock. Sus letras son directas y son la respuesta a esa necesidad latente de la sociedad, en la que despertar la mente, abrir los ojos y generar conciencia, son prioridades para cambiar el rumbo del mundo actual.
«La banda suena a eso que yace dentro de cada bogotano, que está dormido y no quiere callar su inconformidad», expresa el power dúo.
Bajo esta premisa, Operador, a través de un trabajo autogestionado, ha dado a conocer cuatro sencillos: ‘No es No’, ‘Mar de Monstruos’, ‘Despierta Bogotá’ y ‘Comiendo Tierra’, canción con la que busca extender su presencia en la escena independiente de Colombia y Latinoamérica, bajo la mentoría de Aida Hodson, gestora cultural con más de 25 años de trayectoria en los circuitos del rock y el metal nacionales.
«El proceso de producción ha sido completamente desde la autogestión: la grabación de las canciones, imagen, fotografía, videos y conciertos en vivo», agrega Operador.
Para los hermanos, Bogotá, no es solo la ciudad que vio nacer su proyecto; sino un insumo inagotable para sus composiciones.
«Operador es sociedad, es resistencia. Bogotá, parece ser un monstruo creado para perseguirte y no dejarte tranquilo». Finaliza.